NAUTICA DE RECREO

DE ESPALDAS AL MAR

ARTÍCUO DE: Héctor J. Saavedra

Ahora que por doquier se escucha la palabra “crisis”, la empresas y gobierno afinan sus estructuras para maximizar el beneficio de sus inversiones o bien para intentar mantener las tasas de empleo con obra pública. Se producen mejoras en infraestructura hotelera, nuevos campos del golf, avenidas comerciales, paseo, calles, ya que todo ello, redundará en un objetivo común, intentar reactivar la economía.

Canarias en la actualidad, tiene un ambicioso plan de renovación-mejora de todos los puertos gestionados por la Comunidad Autónoma, que en mayor o menor medida, se lleva a cabo según lo planificado a pesar del esfuerzo que supone en estos momentos tan difíciles.

Desafortunadamente, nadie habla de la náutica de recreo, como añadido al valor turístico, nadie gestiona de forma eficiente lo que se tiene para poder sacarle el mayor partido y la oportunidad es inmejorable desde mi punto de vista.

La iniciativa “comercial y turística” de la náutica de recreo, por desgracia para los Canarios, se encuentra únicamente y exclusivamente en manos de empresas privadas, salvo casos aislados. Pongamos el ejemplo de Puerto Calero S.A, que gestiona Puerto Calero en Lanzarote, han creado un emporio de lujo-glamour, donde antes no había nada y les explico como. Primero invierten en el puerto, amarres en condiciones con agua, luz, seguridad y profesionales cualificados, luego gestionan la construcción de complejos hoteleros para poder ofertar alojamiento al navegante que los visita, turistas con alto poder adquisitivo y finalmente la venta de fincas mediante su inmobiliaria. Gestionan de igual modo el alquiler de un centro comercial y locales para tiendas de lujo, restaurante, pubs y hasta un museo del cetáceo, todo construido por ellos, es decir, primero estudian la necesidad de falta de atraques de “calidad” y luego ofertan el resto de los servicios añadidos con los empleos adyacentes que ello conlleva.

Una vez creada la “Marina”, se preocupan por el caché de la misma, para que el nombre de la empresa “Puerto Calero” se oiga en los lugares náuticos por excelencia. Preparan regatas, torneos de pesca de altura, conferencias, conciertos, exposiciones, desfiles de moda, se ofrecen como base para entrenamiento de equipos internacionales como Sony Ericsson, etc. Una vez tienen, nombre y prestigio, los precios de sus servicios ofertados pueden incrementarse, ya que a diferencia del resto de puertos, ofrecen “CALIDAD” y los turistas náuticos que nos visitan lo pagan, para estar en una marina de prestigio, para alojarse en sus hoteles, para comer en su restaurante y para consumir sus servicios añadidos:

· Asistencia de traducción e información en todo lo que se refiere a todas sus necesidades desde ocio hasta localizar repuestos y otras adquisiciones.

· Servicios de Telefonía e Internet.
· Asesoramiento de servicios bancarios.
· Tomas monofásicas y trifásicas de 220 y 380V de electricidad hasta 220 Amperios.
· Conexión de agua potable.
· Gestiones de aduana e inmigración.
· Servicio de entrega a bordo de avituallamiento y flores
· Suministro de combustible
· Contratación de coches de lujo con chofer para recorrer la isla
· Asistencia con planes de viaje
· Catering especial desde el restaurante
· Servicio de lavandería y tintorería.
· Servicios de limpieza
· Alojamiento de lujo

Después toca la EXPANSIÓN.

Una vez estudiada la situación en el Puerto de Santa Cruz de la Palma, Club Náutico de La Palma, por ejemplo, donde debido a una pésima gestión de servicios por parte de la Cofradía de Nuestra Señora de las Nieves en el varadero y desvalorización de atraques en el Club Náutico, les abren las puertas de una nueva oportunidad de negocio. Se pretende habilitar una pequeña zona comercial, además de una oferta inmobiliaria y la creación de un campo del golf, además de los conocidos servicios añadidos.

Desde mi punto de vista, los puertos gestionados por el Gobierno de Canarias, viven de espaldas al mar. El precepto de “tener un barco es cosa de ricos” es erróneo. No se es consciente del dinero y los puestos de trabajo que se pueden generar, tanto directa, como indirectamente y más si cabe, en una comunidad rodeada de mar, con un “ejercito potencial para la reconversión” de profesionales provenientes del sector pesquero, actualmente en decadencia. Existen otros servicios complementarios que “activan” la economía y dan valor añadido al lugar donde radican los puertos, como pueden ser tiendas náuticas, talleres, electricistas, restaurantes, hoteles, campos de golf, etc., en definitiva, todos remamos en un mismo sentido para incrementar la oferta turística de alto poder adquisitivo.

Me gustaría dejarles, una serie de preguntas, para que cada uno las conteste de forma reflexiva y valorando lo que tiene al lado de su casa.

¿Se mejorará la gestión de los Puertos Canarios una vez ampliados?
¿Será más espacio para el mismo desorden?
¿Se ofertarán servicios añadidos?
¿Habrá profesionales cualificados en los puertos?
¿Son las concesiones la solución a una buena gestión?
¿Nos preocupamos en atender el turismo náutico?
¿Promocionamos la náutica en las ferias de turismo?
¿Tenemos los canarios que acogernos a las tarifas dictadas por Entidades Privadas?
¿La reconversión del pescador a marinero de marina puede ser una solución laboral?

Puertos de espaldas al mar

Lanzarote (Caleta de Sebo, Órzola, Puerto del Carmen, Playa Blanca)
Fuerteventura (Corralejo, Gran Tarajal, Morro Jable)
Gran Canaria (Las Nieves, Arguineguín)
Tenerife (Puerto de la Cruz, Garachico, Playa San Juan)
La Palma (Tazacorte – actualmente concesión)
La Gomera (Puerto de Vueltas, Playa Santiago)
El Hierro (La Restinga)